4 de junio, Zitácuaro,
Michoacán, México. Director del
Encuentro Internacional de poetas que se organiza en Zamora, Michoacán, México
desde 1997. Promotor cultural independiente. Dirige la Asociación Civil
Cultural, Arte y Tradición y la Editorial CAT.
Ha dado más de cien
recitales individuales y más de cien colectivos en: Argentina, Bolivia, Brasil,
Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, Egipto, España, Estados Unidos de Norteamérica, Francia,
Grecia, Guatemala, Italia, México, Perú, Cuba, República Dominicana, Rumania,
Uruguay y Venezuela.
Algunos de sus textos
están traducidos al: italiano, francés, portugués, sueco, inglés, griego y al
árabe.
Publicaciones: Poemas de Espejo,1982, La Noche Rueda del
Tintero, 1985, Diez Años Después,1994, Recuerdos de Pasión, 1996, De Peces y de
Colores, 1999, Vino Blanco Para Dos, 2002, De Amargo Color Salado, 2003, Agua
de Mar, 2005, Elegías a la Muerte de mi Padre, 2005, Desnudo en el Espejo,
2006, Mujeres de Luz, 2007, Tal vez seremos inmortales, Bogotá Colombia, 2008,
Sin la cordillera de por medio, 2008, La líquida fatalidad del escalpelo, Nueva
York, 2009, El negro temor que maravilla, Pontevedra, España, 2011, Esquirlas
de aire, 2011, Alexia cuatro veces dijo no, 2013, De nombre
invertebrado, Duitama, Colombia 2014. Cantar de sombras, 2017, También nosotros
volamos papalotes, 2019.rto Reséndiz
Carmona
4 de junio, Zitácuaro,
Michoacán, México. Director del
Encuentro Internacional de poetas que se organiza en Zamora, Michoacán, México
desde 1997. Promotor cultural independiente. Dirige la Asociación Civil
Cultural, Arte y Tradición y la Editorial CAT.
Ha dado más de cien
recitales individuales y más de cien colectivos en: Argentina, Bolivia, Brasil,
Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, Egipto, España, Estados Unidos de Norteamérica, Francia,
Grecia, Guatemala, Italia, México, Perú, Cuba, República Dominicana, Rumania,
Uruguay y Venezuela.
Algunos de sus textos
están traducidos al: italiano, francés, portugués, sueco, inglés, griego y al
árabe.
Publicaciones: Poemas de Espejo,1982, La Noche Rueda del
Tintero, 1985, Diez Años Después,1994, Recuerdos de Pasión, 1996, De Peces y de
Colores, 1999, Vino Blanco Para Dos, 2002, De Amargo Color Salado, 2003, Agua
de Mar, 2005, Elegías a la Muerte de mi Padre, 2005, Desnudo en el Espejo,
2006, Mujeres de Luz, 2007, Tal vez seremos inmortales, Bogotá Colombia, 2008,
Sin la cordillera de por medio, 2008, La líquida fatalidad del escalpelo, Nueva
York, 2009, El negro temor que maravilla, Pontevedra, España, 2011, Esquirlas
de aire, 2011, Alexia cuatro veces dijo no, 2013, De nombre
invertebrado, Duitama, Colombia 2014. Cantar de sombras, 2017, También nosotros
volamos papalotes, 2019.

Fragmento de Alexia cuatro veces dijo no
Alexia
desde siempre hemos estado solos
más cuando la noche golpetea la sabana oscura de los huesos
y la cicatriz peregrina de la sangre.
Vivimos asustados
temblamos
y no hay refugio
para enfrentar con dignidad la suerte.
Hay días
en que deseamos saber el final de la ceguera
la muerte de los otros
subastamos llaves
arcones de cuero
la cicatriz del vientre
la magia que se untaba en los espejos.
Hay noches en que ardemos sin lengua
sin piel para frenar el cuerpo
sin sueños que aligeren vuelcos.
En medio de la oscuridad que nos engendra
estamos despoblados
más solos que nunca
y un desnudo terror habita nuestra casa.
Alexia
desde siempre hemos
estado solos y más
cuando la noche golpetea la sabana de los huesos.
Alexia
te recuerdo
ya no debemos seguir hablando de lo mismo.
El mundo cada vez está más oxidado
y las Torres de Babel
se erigen en cualquier lugar del asco.
No hay corrientes seguras en el agua
los bárbaros del norte
se han dejado venir como parvada de langostas
y gritan pronombres del infierno.
Cada día paren ruidos diferentes llueven misiles
polvos enredados
hologramas que guillotinan los domingos.
Por ello Alexia
ya no debemos soñar con el pasado
el odio se ayunta con la guerra
y ensangrenta los aleteos del barco.
Alexia te recuerdo
ya no debemos seguir hablando de lo mismo.
Días azules
Me gusta que los niños griten consignas socialistas
que las mujeres pelirrojas
pasen al frente de la iglesia peregrina
los días azules, las doncellas de negro,
un campanario tañendo para nadie.
Puedo esperar en las rocas, cuatrocientos kilómetros de tedio
beber ocho copas de hierbas con los ojos cerrados
jugar al solitario, ser un paria vestido de blanco
con una begonia entre los brazos.
Me gusta no saber si es martes o domingo
tirar las cartas, leer los dedos de las manos,
ser paciente enfermo de derrotas
caminar a oscuras en estaciones de abordaje
en donde nadie vende billete al paraíso.
Me gusta no saber si la mañana tendrá corpiños de seda
condensar ocho horas de espera en la terminal catorce
pasar “Entre Lusco e Fusco”
entorpecer palabras, perder el sentido,
despertar en cualquier hostal de caminante.
Me gustan las mujeres desnudas con tatuaje en los tobillos
flotar entre pétalos naranjas
vivir como loco, arrastrar carruajes del siglo diecisiete,
morder el polvo, el cascarón que duele todavía.
Me gusta cruzar los puentes de las ciudades congeladas
el secreto musical del albedrío
las huellas de las piernas cálidas
correr, sentarme, extraviar el boleto de vuelta,
las páginas del diario de mañana.
Me gusta regresar al mar, encontrar, la piedra que faltaba…